Un lugar que parece de otro planeta

Ladakh es una región en el estado indio de Jamu y Cachermira delimitada por la cordillera del Himalaya en el sur. Nada tiene que ver esta zona con la típica imagen que nos viene a la cabeza cuando pensamos en India.

La población pertenece a diferentes etnias y mayoritariamente son budistas tibetanos, a diferencia del territorio restante de Cachemira que son musulmanes. La gente es modesta, pero generosa, hospitalaria y entrañable.

Muy admirado por la belleza de sus montañas remotas y su cultura primitiva, en ocasiones Ladakh es conocido como el "Pequeño Tibet". El paisaje lunar y los monasterios milenarios enclavados en la roca desnuda recrean una extraña y emocionante sensación. Los valles surcados por ríos míticos, como el Indo, cuyas aguas turquesas contrastan con las montañas de tonos ocres y rojizos, recrean un escenario que parece de otro planeta.

El punto de partida más habitual de cualquier expedición es la ciudad de Leh a 3.650 metros de altitud. Muy recomendable es la visita del monasterio de Alchi, que data del S. IX y alberga alguno de los mejores murales y frescos de iconografía budista.

El monasterio de Lamayuru es una parada que también merece la pena. Enclavado en lo alto de una peña desgastada, circundado por elevadísimas cimas y por un lago desecado, hacen de este antiquísimo Gompa un lugar de ensueño.

La fauna de Ladakh posee muchos puntos en común con la de Asia Central. A pesar de ser una zona árida, posee una gran diversidad de aves y numerosas especies de montaña como el baral, el ibex, el leopardo de las nieves, el antílope y la rara gacela tibetana. También es posible encontrar ejemplares de la oveja Urial tibetana, el asno salvaje y el zorro de arena.

Ladakh constituye una región de infinita belleza y un lugar anclado en el tiempo que es frecuentado por viajeros que buscan aventura en lugares inhóspitos. Ecowildlife ha organizado una expedición el 13 de septiembre.

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Un gigante de mar en la costa de Península Valdés

El elefante marino es un género de mamífero pinnípedo de la familia de los  fócidos integrado por dos especies: el elefante marino del norte (Mirounga angustirostris) y el elefante marino del sur (Mirounga leonina). El macho de este último es el mayor pinnípedo que existe en la actualidad y probablemente el mayor que haya existido.

El elefante marino del norte vive a lo largo de la costa oeste de Norteamérica, entre California y México, en ocasiones, es posible encontrarlo en Alaska. La distribución del elefante marino del sur es mucho más amplia. Se reproduce en las costas de la Patagonia Argentina, Islas Malvinas, Antártida, Tasmania y Nueva Zelanda.

 La principal característica de estas especies es la presencia de un enorme dimorfismo sexual, el mayor entre todas las especies de mamíferos. Los machos pueden superar los 6 metros de longitud y las 4 toneladas de peso mientras que las hembras apenas alcanzan los 3 metros y 900 kilos. Además, los machos presentan una proboscide similar a una trompa, que desarrollan a parti de los 8 años de edad. De ahí su nombre común.

El elefante marino pasa la mayor parte del tiempo en el mar y sólo se acercan a las costas para mudar el pelaje y reproducirse. Para ello, los machos se enfrenta en batallas realmente violentas con el objetivo de dominar la porción de playa lo más grande posible para constituir un harén y aparearse con distintas hembras. El periodo de gestación dura aproximadamente 10 meses y las hembras dan a luz a una única cría de color negro y unos 35 kilogramos de peso.

Por su tamaño, los elefantes marinos adultos tienen pocos depredadores. Las hembras y los jóvenes pueden ser ocasionalmente presas de las orcas y del gran tiburón blanco. Sin embargo, el mayor peligro para esta especie lo ha constituido la caza humana. Durante el S. XIX se abatieron muchos ejemplares con el fin de comerciar su carne, piel y, especialmente, su grasa que se convertía en aceite. En la actualidad están protegidos y la población de ambas especies ha incrementado notablemente.

Ecowildlife ha organizado una expedición para explorar la costa de Península Valdés en Argentina, un lugar que fascinará al viajero por la abundancia de fauna salvaje marina y por ser el único apostadero continental en el que es posible ver al elefante marino del sur en estado salvaje. La ballena franca austral y el lobo marino de un pelo son otras especies que podrán avistarse en su medio natural. La salida está prevista para el 20 de agosto.

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Tiburones de agua dulce en Cocibolca

El Gran Lago de Nicaragua o Cocibolca, nombre que le dieron los nativos, es el lago más grande de América Central y el segundo de mayor tamaño de América Latina después del Lago de Maracaibo en Venezuela. Tiene una extensión de 8.624 kilómetros cuadrados y alberga más de 400 isletas, tres islas y dos volcanes.  La ciudad de Granada se encuentra en la orilla noroccidental del lago.

El Lago Nicagarua alberga numerosas especies de peces como el gaspar y el pez sierra, pero su habitante más famoso es, sin duda, el "tiburón de agua dulce" (Carcharhinus leucas) conocido generalmente como el tiburón toro del Caribe.

En un principio los tiburones viajaban entre el lago y el mar Caribe por el río San Juan, pero los ejemplares más jóvenes fueron adaptándose hasta llegar a ser capaces de reproducirse en agua dulce. Debido a su agresivo comportamiento, el tiburón de agua dulce simbolizó un residente muy temido por los pescadores del lago. Sin embargo, durante el gobierno de la dinastía Somoza, se instaló en el río San Juan una planta procesadora de aletas de tiburón de nacionalidad japonesa. Desde entonces, la población de tiburones descendió bruscamente y en la actualidad se estima que apenas unos pocos sobreviven timidamente en el lago.

Por otro lago, el lago Nicaragua alberga dos íslas principales cuyas condiciones han originado la creación de auténticos santuarios de la biodiversidad por la abundancia de flora y fauna:  la Isla de Zapatera, declarada Parque Nacional y la Isla de Ometepe, la más grande del mundo en un  lago de agua dulce. En el interior de esta última se encuentran dos volcanes, uno de ellos activo, el Volcán Concepción y el otro, el Volcán Maderas que ha constituido una importante atracción en la ísla por su belleza primitiva. Además Ometepe posee abundantes vestigios arqueológicos precolombinos que atestiguan la antiguedad de los asentamientos humanos en su suelo.

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Cape Town, una urbe de gran riqueza natural

Ciudad del Cabo, quizá la urbe más moderna, dinámica y cosmopolita del continente africano. Una ciudad vibrante que rebosa vitalidad y energía en la que es posible realizar actividades de todo tipo.

Ciudad del Cabo se caracteriza por su geografía escarpada. Consta de una cadena montañosa conocida cómo los Doce Apóstoles que termina en el Cabo de Buena Esperanza. Esta península erróneamente se ha considerado el punto dónde se encuentran el océano Atlántico y el Índico. Ese punto es el Cabo de las Agujas ubicado 150 kilómetros más al sur.

La Montaña de la Mesa de 1.086 metros de altitud domina el fondo de la ciudad. Está flanqueada por el Pico del Diablo y la Cabeza de León. Desde su cima será posible obtener una vista panóramica de la ciudad. La zona colindante a Ciudad del Cabo es también mundialmente conocida por los viñedos.

Para los amantes de la naturaleza el Cabo de buena Esperanza es un lugar especial. Además de hermosas playas de agua verde esmeralda, este lugar alberga una reserva natural habitada por monos, antílopes grises y cebras de montaña. Para llegar hay que atravesar bellísimos pueblos y paisajes costeros especataculares.

La fauna marítima también es muy rica y variada. A pocos kilómetros de Ciudad del Cabo, se sitúa Boulders Beach, una playa dónde vive una colonia de más de 300 pingüinos desde 1985 cuando se establecieron de forma espontánea. También es posible avistar cetáceos en la Bahía False y leones marinos. El resultado es una región de verdadera riqueza faunística.

En el Cabo también es posible encontrar una abundante variedad de flora. Existen más de 1.200 especies de plantas y muchas otras sin clasificar, lo que convierte a la península en el sexto reino floral del mundo.

Además de los atractivos naturales, Ciudad del Cabo cuenta con otras atracciones como la visita de la ísla Robben, dónde Nelson Mandela fue encarcelado por décadas, y la posibilidad de practicar numerosos deportes acuáticos

Ecowildlife te quiere introducir en un país tan apasionante como Sudáfrica. Para ello ha preparado una salida especial el 24 de agosto, dónde además de disfrutar de una ciudad como Ciudad del Cabo, se podrá explorar el Parque Nacional de Kruger en busca de los famosos 'Big Five'.

Ganadores del I Certamen de Fotografía Ecowildlife

¡Ya conocemos a los ganadores del concurso de fotografía Ecowildlife!

En primer lugar, queremos agradecer a todos los participantes, que han sido muchos, su gran aportación. Todos hemos podído deleitarnos con fotografía muy buenas y descubrir muchos rincones del mundo. En total se han alcanzado 1.070 votaciones.

La elección de los finalistas fue una decisión muy complicada que el jurado de Ecowildlife Travel formado por Jofre Blesa, Gemma Marí y Jose Luis Ribera tuvo que afrontar. La originalidad, la composición y la luz fueron aspectos que se tuvieron en cuenta para elegir a aquellos que pasaban a la votación final.

Los ganadores del certamen son los siguientes:

En la categoría 'Fauna', Mercedes González Suárez es la vencedora con 115 votos. En su fotografía 'Cráter del Ngorongoro' capta un momento único en un lugar mágico.

 En la categoría 'Paisajes', María Sasot Martín se alza con el triunfo con 248 votos. En su fotografía 'Islas Cook' los colores del ocaso recrean un escenario espectacular que ha sabido plasmar muy bien.

En la categoría 'Interacción con las comunidades locales', Reme Aboín es el ganador con su fotografía 'Trabajador gallego' en la que muestra de una forma muy realista la labor que desempeñan los pescadores en Galicia. Ha obtenido un total de 283 votaciones.

El premio consiste en un fin de semana para dos personas al Parque Nacional de Monfragüe en Cáceres, dónde los ganadores del concurso podrán disfrutar de la naturaleza y la fauna ibérica con la persona que ellos elijan.

El concurso ha sido todo un éxito por lo que Ecowildlife Travel no descarta la celebración de ediciones futuras. Esperamos que hayais disfrtutado todos con las imágenes de gran calidad artística que nos han dejado los participantes.